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MensajearPuebla, Pue., a 9 de junio de 2025.- Una serie de atracos a grandes establecimientos comerciales, dos de ellos en el Centro Histórico de Puebla, han encendido las alarmas sobre la eficacia de la seguridad pública en la capital poblana y su área conurbada.
El primer hecho fue el asalto al Sam’s Club La Noria, el 4 de junio, donde sujetos armados amagaron a los empleados y con mazos destruyeron los exhibidores de teléfonos celulares, sustrayendo alrededor de 20 aparatos. Las autoridades informaron posteriormente que dos motociclistas fueron detenidos como presuntos partícipes en los hechos.
El segundo incidente ocurrió el jueves 6 de junio, cuando un grupo armado irrumpió en la tienda departamental Coppel, ubicada en pleno centro de la ciudad. De acuerdo con los reportes oficiales, los delincuentes sustrajeron al menos 40 teléfonos móviles, algunos de los cuales fueron ocultados en papel aluminio con el aparente propósito de evitar su rastreo.
La rápida intervención de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) del municipio, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública estatal, permitió la detención de cinco presuntos implicados, así como el aseguramiento de dos motocicletas, armamento y otros objetos utilizados durante el atraco. Las autoridades vinculan a los detenidos con una posible serie de robos a tiendas similares ocurridos en las últimas semanas.
Sin embargo, la aparente eficacia del operativo no impidió que, al día siguiente, se registrara un segundo hecho delictivo. El sábado 7 de junio, el Centro Joyero, ubicado en la Plaza de la Tecnología —a escasas calles del primer robo— fue blanco de otro asalto. En esta ocasión, un grupo de hombres armados logró llevarse una importante cantidad de joyería de oro, con un valor estimado superior a los 400 mil pesos. La acción ocurrió en plena jornada comercial, y aunque había presencia de seguridad privada y comerciantes en el lugar, los responsables lograron huir sin ser interceptados.
Los testigos y clientes del centro joyero fueron quienes alertaron a las autoridades, pero hasta ahora no se ha informado de detenciones ni avances significativos en la investigación.
A decir de las autoridades estatales, son tres bandas diferentes las que cometieron estos atracos, y se refugian en el Centro Histórico de Puebla; es decir, en el corazón político del estado, donde despachan el Alcalde y el Gobernador.
