Querétaro, Querétaro, a 12 de diciembre 2025.- El vicario de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, destacó el papel histórico y espiritual de la Virgen de Guadalupe como motor de unidad del pueblo mexicano y como figura central en los procesos de evangelización durante los últimos cinco siglos.
“La Virgen es una síntesis entre el cristianismo y la religión azteca, y está en el corazón del nacimiento del pueblo mestizo”.
Recordó que, desde su aparición en el cerro del Tepeyac, la Virgen de Guadalupe se convirtió en un ícono que unió a los mexicanos, al representar un puente entre las tradiciones indígenas y el mensaje cristiano traído por los misioneros. “Ella es el epicentro del México nuevo que nació después de la conquista”.
Subrayó que la Virgen ha estado presente en todos los procesos evangelizadores de México, razón por la cual es llamada “la estrella de la evangelización”. La devoción mariana, dijo, se ha extendido a lo largo y ancho del país y también más allá de sus fronteras.
En referencia a la celebración del 12 de diciembre, Lara Becerril recordó que el año pasado más de 11 millones de personas acudieron a la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México, convirtiéndola en el santuario más visitado del mundo, incluso por encima del Vaticano. “Es una concentración multitudinaria en torno a una devoción realmente impresionante”.
Destacó que existen réplicas e imágenes de la Virgen de Guadalupe en distintas partes del mundo, y que los misioneros mexicanos siempre llevan consigo su imagen al iniciar labores en otros países.
Señaló que los migrantes en Estados Unidos han difundido la devoción guadalupana, convirtiéndola en un símbolo de identidad y fe para las comunidades mexicanas en el extranjero.








