Compartir
Twittear
MensajearSan Martín Texmelucan, Pue., a 26 de junio de 2025.- La reciente detención de Mario Alberto “N.”, alias La Marrana, presunto líder del crimen organizado en Puebla, ha desatado una ola de violencia en la región donde operaba una red criminal dedicada al robo de hidrocarburos y otras actividades ilícitas.
En las últimas 48 horas, dos personas vinculadas a su organización han sido ejecutadas en eventos distintos, mientras que una abogada resultó gravemente herida y una joven de 21 años sufrió lesiones colaterales.
Uno de los asesinatos ocurrió en pleno centro de Texmelucan, donde fue ultimado Marco Antonio N., excomandante de la Policía Ministerial y abogado defensor del propio Mario Alberto “N”. Durante el ataque, su esposa —también abogada— fue alcanzada por los disparos y trasladada a un hospital de la región. El vehículo en el que se desplazaban terminó estrellado contra una panadería, provocando que una joven que se encontraba en el lugar también resultara herida.
Horas después, la violencia continuó con la ejecución de Giovanni, de 35 años, en la junta auxiliar de San Cristóbal Tepatlaxco. Trascendió que este segundo individuo tenía presuntos vínculos con el negocio ilegal de distribución de gas LP, conocido como huachigas, y operaba como colaborador cercano de La Marrana.
La captura de Mario Alberto “N.”, operador del Cártel Jalisco Nueva Geneació (CJNG) tuvo lugar el pasado 11 de junio en el Valle de Chalco, Estado de México, durante un operativo coordinado por la Fiscalía General del Estado de Puebla, la Secretaría de Marina (SEMAR), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Fiscalía del Estado de México.
Identificado como “jefe de plaza” en varios municipios poblanos —como Santa Rita Tlahuapan, San Matías Tlalancaleca y San Salvador El Verde—, La Marrana enfrentará cargos por una larga lista de delitos, que incluyen robo de transporte de carga, extorsión, secuestro, ejecución de rivales y distribución ilícita de combustibles. Entre los casos más impactantes se encuentra el hallazgo de un cuerpo emplayado y decapitado el pasado 23 de marzo, crimen que, según autoridades, llevaba su firma.
Su peligrosidad llegó a tal nivel que fue incluido en una lista de objetivos prioritarios del FBI, según confirmó el secretario de Seguridad, Omar Harfuch.
Las autoridades continúan investigando si los recientes asesinatos forman parte de una cadena de represalias entre grupos criminales por la caída de su líder, mientras los habitantes de la región exigen mayor presencia y acción de las fuerzas de seguridad ante la creciente inseguridad.
