Uruapan, Mich., a 22 de septiembre de 2025.- Luego de que en un lapso menor a una semana tres agentes de la Policía Municipal de Uruapan fueran baleados en el cumplimiento de su trabajo en filtros de seguridad, ataques que dejaron un agente muerto y dos mujeres policías heridas, pobladores denunciaron que estos agentes padecen de condiciones precarias de trabajo, además de ser expuestos a propósito, al ser elementos que no pudieron ser despedidos a la llegada de la administración del alcalde Carlos Manzo.
El domingo 14 de septiembre, un ataque armado contra dos agentes en un filtro de seguridad, dejó un saldo de un agente muerto, quien ni siquiera tuvo tiempo de empuñar su arma; su compañera logró repeler el ataque, aunque resultó herida.
Fotografías del lugar evidencian que los agentes se encontraban bajo la lluvia en un pequeño refugio de lonas, sin algún parapeto o barricada; asimismo, a pesar del peligro que se vive en Uruapan, el tercer municipio más inseguro de México de acuerdo con sus pobladores, solo había dos policías en el retén nocturno.
Los pobladores manifestaron que los agentes baleados eran los marginados, aquellos que el alcalde Carlos Manzo no pudo despedir a su llegada al poder, hace un año, cuando argumentando corrupción hizo despidos masivos, aunque nunca comprobó sus dichos. Asimismo, pobladores y medios locales como "La Garra Uruapan" documentaron que los agentes han pedido mejores armas y barricadas con costales de arena en los retenes, cosa que nunca les dieron.
Manzo chantajeó al gobierno del estado con el cierre de las obras del Teleférico, como medida de presión para que fueran detenidos los responsables del ataque contra los uniformados. El alcalde exmorenista que en su campaña se dijo en contra de esta obra, no la detuvo ni exigió justicia cuando mataron al abogado Isidro Ramos Sandoval, ultimado tras ampararse contra el Teleférico, el pasado mes de marzo.
Seis días después del ataque contra los policías, tres hombres fueron detenidos, anuncio hecho el pasado sábado; sin embargo, mientras los políticos aún se felicitaban por su logro, delincuentes perpetraban otro ataque contra la Policía Municipal de Uruapan.
El saldo de esta nueva agresión fue de una mujer policía herida. En la escena del ataque se observó que los agentes no tenían ningún parapeto a su alcance, asimismo, a pesar de la experiencia previa y de las recomendaciones de las autoridades estatales, los uniformados estaban en poca cantidad.
De nueva cuenta, los pobladores indicaron que los policías que estaban en el retén, eran los marginados por Carlos Manzo. Sin embargo, las prioridades del alcalde están en otro lado. Una vez que no pudo cumplir con sus promesas de seguridad, se ha dedicado a repartir culpas al estado, la federación e incluso a una serie de figuras políticas como el exalcalde Ignacio Campos, a quienes acusa de sabotear su campaña a la gubernatura, dejando en claro que al municipio de Uruapan ya lo dejo atrás y que ahora busca atraer los reflectores para propósitos electorales.