“Por amor a México”… ¡y con temor en Michoacán!: Marcha Aureoles con escoltas tras hundir en violencia a la entidad

Morelia, Mich., a 13 de diciembre de 2022.- El exgobernador de Michoacán, Silvano Auroeles Conejo, marchó el lunes en Morelia y Salvador Escalante como parte de su campaña proselitista con la que busca cambiar su estatus de político perseguido por la justicia, a perseguido político del régimen, luego de terminar su administración en medio del escándalo por el desfalco de miles de millones de pesos a las arcas de la entidad. Aunque aseguró que dejó seguridad en la entidad, en todo momento escoltas lo acompañaron, sin que se conozca con qué recursos sostiene esta seguridad privada y su campaña.

Aureoles todavía no puede dejar atrás sus manías cuando estuvo al frente del gobierno estatal, disponiendo de más de cuatrocientos de escoltas para él su familia y sus amigos, los cuales sacaba de los cuerpos de seguridad pública para tareas no solo de seguridad, sino de choferes y servidumbre.

Mientras tanto, Aureoles llevó a Michoacán a niveles récord de violencia, con varias ciudades como las más violentas de México e incluso del mundo, además de multiplicar el número de cárteles en toda la entidad.

Entonces como ahora, sus escoltas tienen un código de vestimenta basado en pantalón de mezclilla, camisa y un chaleco que posiblemente oculta armas cortas.

Durante su marcha por Morelia, al menos tres escoltas le cuidaban las espaldas, mientras el exmandatario caminaba al frente del contingente, rodeado de mujeres.

Aunque en su campaña Aureoles prometió pacificar Morelia, al final de su sexenio las muertes por homicidio no solo no disminuyeron, sino que se triplicaron.

Los mismos escoltas que estuvieron con el perredista en Morelia, le cuidaron las espaldas en Salvador Escalante, pero no solo en la calle, sino en un foro a puerta cerrada, sin despegársele ni un segundo.

Salvador Escalante es otro municipio víctima del mal gobierno de Aureoles, cuya tolerancia al crimen organizado permitió el asentamiento de diferentes cárteles y su subsecuente guerra, que hoy todavía sigue viva.

Aureoles ha declarado a las autoridades no tener casas, cuentas bancarias ni vehículos, por lo que este “Rey del cash michoacano” no puede sustentar cómo paga sus escoltas ni su campaña por todo el país.