Ámsterdam, Países Bajos, a 3 de octubre del 2025. - Tras la pandemia, los trabajadores estadounidenses han luchado por mantener sus horarios remotos; mientras la mayoría de los empleados vuelven a la oficina, algunos incluso han impulsado la semana laboral de cuatro días, pero en Países Bajos ese sueño ya es una realidad.
Empleados entre los 20 y 64 años trabajaron una media de 32,1 horas semanales en 2024. Países Bajos presenta la tasa más alta de semanas laborales más cortas de toda Europa; lo siguen Austria, Alemania y Dinamarca, todas con semanas laborales de 34 horas.
Hay una razón principal por la que los holandeses han adoptado discretamente una semana laboral de cuatro días: las mujeres. Tras su incorporación al mercado laboral, las cosas nunca volverían a ser iguales.
Hoy, el cambio de política no solo está ayudando a los padres empleados que deben hacer malabarismos con las responsabilidades de cuidado, sino que también está manteniendo a las personas en la fuerza laboral, mientras otros países luchan con las tasas de desempleo.
Hoy, el cambio de política no solo está ayudando a los padres empleados que deben hacer malabarismos con las responsabilidades de cuidado, sino que también está manteniendo a las personas en la fuerza laboral, mientras otros países luchan con las tasas de desempleo.
En 1991, justo cuando más mujeres asumían empleos a tiempo parcial en los Países Bajos, la tasa de desempleo del país se situaba en el 7,3%, según datos del Banco Mundial. Solo una década después, esa cifra se redujo drásticamente: solo el 2,1% de la población del país estaba desempleada. Si bien ha habido fluctuaciones desde entonces, la tasa de desempleo se ha mantenido baja desde 2018, situándose actualmente en tan solo el 3,6%. Dado que sus ciudadanos tienen opciones de semana laboral más flexibles, más personas pueden mantenerse en la fuerza laboral mientras compaginan sus responsabilidades personales.