Compartir
Twittear
MensajearCiudad de México, 26 de agosto de 2022.- Por segunda ocasión en el año, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) se reunió para abordar el problema de la criminalidad, el cual ha sido, de acuerdo a uno de los integrantes de la Junta de Gobierno de la institución, el principal factor interno que ha impactado en la elevada inflación que vive el país.
De acuerdo con la minuta del Banxico, tras la reunión de política monetaria del 11 de agosto, día en que se pactó el incremento en 75 puntos base en la tasa de interés (con lo que el referencial alcanzó el nivel histórico de 8.5 por ciento), la mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno opinaron que la inflación en el país responde en gran parte a factores globales, como las secuelas económicas por la pandemia del Covid-19 y la guerra en Ucrania.
No obstante, uno de sus integrantes sostuvo que también influye de forma significativa los niveles de criminalidad, pues indicó que se ha visto una presión sobre los precios ligada a este factor interno.
En una reunión previa de política monetaria, la cual tuvo lugar el 23 de marzo, ya se había mencionado qué el alza inflacionaria también obedecía a factores internos cómo la criminalidad, condiciones climatológicas adversas, la falta de ciertos insumos y las presiones salariales.
Con esta visión concuerda el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), cuyo presidente, Mario Correa, subrayó que la inseguridad eleva los costos para las empresas, pues instalar rejas en establecimientos o pagar por seguridad privada, se ve reflejado en el precio final del consumidor.
Además, indicó Mario Correa, si las empresas operan en zonas de alta criminalidad, también están propensas a que la extorsión, configurada como "cobro de derecho de piso", deje de hacer rentable sus actividades comerciales, entonces la oferta para ciertos productos o servicios baja, y eso repercute en la inflación.
Por su parte, la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpeq) señaló que los sucesos violentos ocurridos en Baja California, Colima, Chihuahua y Guanajuato no son buenas señales pues las actividades económicas se retraen y baja el consumo y la producción.
De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de enero a julio se presentó la mayor cantidad de denuncias por extorsión, de las que se tenga registro en el mismo periodo en años anteriores.
aa
