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MensajearNuevo Urecho, Mich., a 28 de noviembre de 2021.- Con líderes anónimos, financiamiento desconocido e intenciones igual de sombrías, cientos de civiles armados, agrupados en la asociación “Pueblos Unidos”, celebraron una nueva cumbre en el municipio de Nuevo Urecho, y aunque dijeron que hay más seguridad en ese municipio, no descartaron hacer justicia por propia mano “para apoyar a nuestra Policía”.
Imágenes que circulan en redes sociales, muestran que lejos de ser desarmados, estos grupos conviven con los cuerpos de seguridad pública, pues se aprecian patrullas acompañando al convoy de camionetas de “Pueblos Unidos”.
El sábado de nueva cuenta “Pueblos Unidos” realizó un despliegue de fuerza, y sus camiones blindados -al parecer de transporte de valores- y ametralladoras usadas por ejércitos para derribar aeronaves, salieron a relucir en los caminos de Michoacán, en total impunidad.
De acuerdo con declaraciones de sus anónimos líderes a la prensa, “Llegamos a acuerdos con la presidenta municipal para que ella aumente el número de policías”.
Aunque no dudaron en movilizarse con cientos de rifles AK-47, mejor conocidos como “Cuernos de Chivo”, fusiles AR-15, todo tipo de escopetas y una ametralladora Browning, además de camionetas y camiones blindados, los civiles armados dijeron que “Las armas se guardan momentáneamente, pero cualquier situación estaremos alertas para apoyar a nuestra Policía”.
Sobra decir que estos grupos armados rebasan por cientos y superan en armamento a los cuerpos de seguridad pública locales.
El financiamiento de estos grupos armados en aquella región, proviene en parte de los empresarios y agricultores, quienes cubren cuotas para trasladar sus mercancías con seguridad; es decir, que los pobladores pagan por su seguridad a un grupo armado que opera en la ilegalidad, como sucedió en aquella región hasta hace pocos años, cuando dominaban los Caballeros Templarios.
Incluso entre los líderes de Pueblos Unidos, habitantes identificaron a un operador regional de Los Caballeros Templarios, Noel Mondragón Peña, alias “El Gorras”, quien hoy se presenta como “Comandante Barrera”; él fue subordinado de Nazario Moreno “El Chayo”, líder de la Familia Michoacana y fundador de Los Caballeros Templarios, encargado de extorsionar a dueños de empaques y productores agrícolas de varios municipios de Michoacán.
