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MensajearCiudad de México, México, a 8 de octubre de 2022.- Documentos, hackeados a la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena), revelan que desde el Campo Militar No. 1 en la Ciudad de México, se ha llevado a cabo la venta de armas a criminales.
En el escrito de inteligencia filtrado y fechado el 10 de junio de 2019 se expone que la Sedena estuvo al tanto de un militar que ofrecía equipo táctico, armas y granadas.
Además de que proporcionaba información de movilidad y operativos de fuerzas armadas, a una célula de un grupo delincuencial, que está asentado en el municipio de Tejupilco en el Estado de México.
En el documento militar se lee que "el 31 de mayo -de 2019- el militar ofreció a operadores del grupo delictivo 70 granadas de fragmentación a un costo de 26 mil pesos cada una; la célula delictiva confirmó la compra de ocho de ellas, las cuales fueron entregadas en Atlacomulco, Estado de México”.
Asimismo, las autoridades corroboraron, en un análisis de metadatos del equipo telefónico utilizado por el soldado, que su base de operaciones ligada a los criminales estaba en el municipio de Villa de Almoloya de Juárez, cercano al octavo regimiento mecanizado de la Sedena.
En dicho informe confidencial, la Sedena reportó que el proveedor de armas y equipo táctico era otro integrante del Ejército, a quién los criminales llamaban “antiguo” y cuya base estaría en el Campo Militar No. 1 de la Ciudad de México -según el análisis de su línea telefónica-.
En los informes de inteligencia aún no se tenía conocimiento de la identidad de ambos militares.
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