Ciudad de México, a 1 de agosto de 2025.- Tras el terremoto que se registró en Rusia en días pasados, con una magnitud de 8.8 grados en la escala Richter, volvió a surgir el interés por el "Cinturón de Fuego del Pacífico", uno de los sistemas tectónicos más peligrosos del planeta.
Kamchatka, que fue el lugar del epicentro del sismo, junto con todo el Lejano Oriente ruso, forma parte del llamado Anillo o Cinturón de Fuego del Pacífico, una franja tectónica de más de 40.000 kilómetros de longitud con forma de herradura que bordea el océano Pacífico y concentra el 90 % de toda la actividad sísmica mundial.
En este cinturón interactúan varias placas tectónicas, la del Pacífico, la de América del Norte, la de Filipinas, la de Nazca, entre otras, que se empujan, se hunden o se friccionan entre sí constantemente, y esto provoca que haya varios terremotos y erupciones volcánicas.
De acuerdo a especialistas, este terremoto que ocurrió, está catalogado como uno de los seis más fuertes, debido a que provocó tsunamis en zonas costeras de Rusia y Japón, donde las olas alcanzaron hasta tres metros de altura y cruzaron el Pacífico, llegando a regiones de Estados Unidos y Hawái.
En Asia, la franja tectónica cruza países como Japón, Filipinas, Indonesia, Papúa Nueva Guinea y el este de Rusia, particularmente la península de Kamchatka.
En Oceanía, Nueva Zelanda también forma parte del anillo.
Mientras que en América, el cinturón va desde el extremo sur de Chile hasta Canadá. Pasando por Perú, Ecuador, Colombia, Centroamérica, México y gran parte de la costa oeste estadounidense.
Cabe resaltar que en Kamchatka, no es la primera vez que ocurre un evento de esta magnitud, en 1952, se registró un terremoto de magnitud de 9 grados, y particularmente el que ocurrió el pasado miércoles, dio algunas señales, debido a que desde el pasado 20 de julio, se detectaron algunos movimientos telúricos, uno de ellos de magnitud de 7.4, con lo que se advirtió que llegaría uno mucho más grande.
Según los especialistas, la magnitud no define la destrucción que puede ocasionar el terremoto, pero sí la profundidad del epicentro, y en el caso de Rusia, el sismo ocurrió a 20 kilómetros de profundidad, por lo que fue más destructivo.