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MensajearZitácuaro, Mich., a 20 de mayo de 2016.- Fuera de toda normatividad, el Comandante Regional de la Fiscalía Regional de Justicia de Zitácuaro, Félix Hernández Hernández, impone a los policías ministeriales una “cuota” de personas presentadas y cateos.
Mensualmente los uniformados de la Fiscalía Regional, que abarca los municipios de Zitácuaro, Maravatío, Ciudad Hidalgo y Huetamo, tienen que cumplir con “metas” para incrementar los índices de eficiencia de la Fiscalía, los cuales son impuestos por Félix Hernández quienes les hace llegar los requerimientos a través de oficios.
Los ministeriales tienen que arreglársela por su cuenta en caso de que no cumplan las “metas”, ya que se exponen a sanciones.
Esta situación propicia la corrupción entre los policías, quienes con el afán de no verse afectados podrían hasta sembrar delitos, afectando a la vez a ciudadanos inocentes.
Algunos elementos de la Policía Ministerial han decidido renunciar antes que cumplir con dicha exigencia que vulnera los derechos humanos de los uniformados y de la ciudadanía.
Félix Hernández Hernández fungió como Comandante Regional de la PGJE en el municipio de Uruapan, donde fue señalado de estar relacionado con la “ordeña” de combustible de los ductos de Pemex. Sin embargo, lejos de ser sancionado, Hernández Hernández fue trasladado a Zitácuaro para alejarlo del escándalo.
Ante esta situación se espera el actuar de la Comisión Estatal de Derechos Humanos así como de Asuntos Internos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, toda vez que ya tienen algo qué investigar al interior de dicha dependencia, sobre algo que es muy común y no denunciado.
