Nogales, Ver., a 12 de diciembre de 2016.- Una peregrinación organizada por una empresa gasera a un santuario guadalupano se tornó en tragedia al explotar un tanque de gas. El saldo es de dos niños muertos y al menos 10 personas heridas.
Los hechos se registraron la tarde de ayer domingo, en el municipio de Nogales, donde decenas de personas recorrían las calles con rumbo a un templo en Orizaba.
La peregrinación fue organizada por la empresa Soni Gas, acompañando a los fieles con camionetas equipadas con un tanque de gas que utilizan para propulsarse.
En un momento determinado, uno de los cohetes que a su paso por las calles acostumbran a detonar los peregrinos, golpeó al tanque de una camioneta, causando su explosión.
Los hermanos Rogelio y Kevon C., de 9 y 13 años de edad, respectivamente, perdieron la vida, mientras que al menos otras 10 personas resultaron lesionadas, tres de ellas de gravedad.