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MensajearMorelia, Mich, 19 de agosto de 2016.- “Si hubiera un asunto donde estuviese involucrado una persona originaria de una comunidad indígena y no haya sido debidamente asesorado por un traductor que tenga pleno conocimiento de la lengua de que se trate y además del procedimiento jurídico, tendría que reponerse el procedimiento para no dejarlo en estado de indefensión”, sugirió Juan Antonio Magaña de la Mora, magistrado cuarta sala penal ante la pregunta sobre el procedimiento que se debe seguir cuando hay indígenas presos y que aún no han sido procesados.
En ese sentido el jurista dijo que el primer requisito para realizar un proceso es que el detenido esté asistido por un traductor de su lengua y además tenga capacidad y conocimientos en el Nuevo Sistema de Justicia Penal “los jueces de origen, al llevar a cabo el estudio de la sentencia, al verificar que una de las partes tenga un origen de una comunidad, aún cuando no lo pidieran las partes, el juez tiene la obligación de ordenar inmediatamente la reposición del procedimiento, esto ya es obligación de oficio de los juzgadores”.
Magaña de la Mora calcula que existen más de dos mil audiencias orales pendientes por realizar; más las que se acumulen del sistema tradicional, -sin especificar cuántos de éstas corresponden a indígenas-, “pero hay asuntos que deben entrar asesores de conocimientos jurídicos y conocedores de la lengua indígena. Bastaría incluso sin estar viviendo en su comunidad, pero que tuviera su origen en ésta para que se le de este tipo de asesoramiento”.
Por ello, el magistrado se pronuncia porque exista un mayor número de profesionales “si no tenemos una asistencia adecuada para garantizar ese exceso a la justicia tendríamos los procedimientos, no estarían garantizados en los derechos humanos, acceso a la defensa y la justicia, por tanto el que podamos preparar a profesionales en el Nuevo Sistema de Justicia Penal podemos hacer que el estado de Michoacán garantice líneas estratégicas”.
