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MensajearMorelia, Mich., a 24 de noviembre de 2020.- Tres policías de Tránsito con placas no oficiales y una grúa particular, es lo que se necesitó para dejar en la calle a una familia con un recién nacido y un niño pequeño, cuyo auto fue remitido al corralón sin cumplir los agentes siquiera con tener una placa legítima en sus unidades. Al ser exhibidos por un ciudadano, los agentes de Tránsito y Movilidad del estado de Michoacán, huyeron.
Los hechos se registraron en las inmediaciones del monumento al Pípila de Morelia, donde una gavilla de policías de Tránsito del estado sorprendió a una familia que viajaba en un coche de modelo atrasado, con placas de Guanajuato.
Un ciudadano que se percató de lo que ocurría, grabó el momento en que la grúa de “Grúas Monarca”, empresa beneficiada por la Administración de Silvano Aureoles Conejo, ya llevaba consigo el auto de la familia, dejando en la calle a una madre con su hijo recién nacido y otro niño pequeño.
El ciudadano evidenció que una de las motocicletas usadas por los agentes que estaban abusando de la familia, no llevaba una placa metálica como debería de ser, sino que tenía sus placas pintadas directamente en la moto. Dicha unidad lleva el número 3022 y es seguida por la unidad 3060 y una tercera moto cuyo número no se ve en el video.
Esta no es la primera ocasión en que se evidencia el abuso e irregularidades de los agentes de la Dirección de Tránsito y Movilidad del estado, que encabeza Jorge Alvarado Serrato, compadre del gobernador y del exsecretario de gobierno y hoy aspirante a la gubernatura, Carlos Herrera Tello.
La corrupción de la Dirección de Tránsito y Movilidad de Michoacán, que opera en contubernio con un par de empresas de grúas particulares, ha demostrado ser un jugoso negocio para los funcionarios estatales, quienes se allegan de miles y miles de pesos todos los días por extorsiones a conductores y a los propios agentes de la corporación, que tienen que cubrir una cuota diaria de dinero en efectivo y vehículos remitidos al corralón, han denunciado ellos mismos.
Lejos de ser investigado, el encargado de despacho de esa dependencia, Jorge Alvarado Serrato, ha sido premiado con diferentes cargos a lo largo de la Administración de Silvano Aureoles Conejo, desde que este asumió el poder en 2015.
El botín que representa la Dirección Tránsito ha sido reconocido por el Gobernador y el exsecretario de gobierno y alcalde con licencia de Zitácuaro, hoy aspirante a la gubernatura, Carlos Herrera Tello, quien premió a una de las hijas de Jorge Alvarado, Karina Alvarado, al otorgarle la titularidad de la Secretaría de la Mujer de ese municipio, área recién creada y de la que la hija de Alvarado Serrato es su primera titular, además de ser regidora local.
Antes de eso, Silvano Aureoles la nombró Delegada Regional de Turismo de la Zona Oriente de Michoacán, y fue una de las últimas personas que vio con vida al activista de los Bosques de la Monarca Homero Gómez, que fue asesinado (a decir de su familia) luego de reunirse con tres políticos del Oriente michoacano. Las pertenencias de Homero Gómez aparecieron en manos de un acompañante de la regidora Erika Karina Alvarado, esta última quien se amparó tras hallarse el cadáver del ambientalista.
El gobierno del estado, en manos de los políticos zitacuarenses Silvano Aureoles y Herrera Tello, ha dado por concluido ese caso.
Otra hija de Jorge Alvarado, Kitzia Yamileth, fue nombrada por instrucciones de Silvano Aureoles Conejo, como funcionaria de la Secretaría de Desarrollo Económico.
La Familia de Jorge Alvarado, beneficiada por el perredismo estatal, presume viajes a más de una docena de países en varios continentes, así como apuestas en los casinos de Las Vegas, toda una vida de lujos a cargo del erario estatal y municipal de Zitácuaro, y con el dinero de los conductores presas de los agentes de Tránsito y Movilidad del estado.
