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Morelia, Mich., a 01 de agosto del 2014.- Traumatismos craneoencefálicos, problemas de lenguaje y conductuales, así como trastornos vasculares cerebrales y degenerativos como el alzheimer y el parkinson, son algunos de los problemas más frecuentes que se atienden con neuropsicología y que se pueden diagnosticar en la Facultad de Psicología de Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), a través de su Centro Integral de Intervención Psicológica (CIIP).
A decir del profesor investigador Erwin Villuendas González, el CIIP cuenta con varios especialistas en estas áreas que pueden brindar un diagnóstico a la población en general con un costo establecido mediante un estudio socioeconómico, para que esto no sea un impedimento.
A decir del también Coordinador de la Maestría en Psicología, la neuropsicología es el área encargada del estudio de procesos psicológicos como percepción, memoria y sobre todo, de brindar atención a pacientes con algún tipo de lesión cerebral.
“Nos interesa saber qué ocurre con estos pacientes, cuáles son sus alteraciones concretas con el objetivo de intervenir y ofrecerles estrategia y ejercicios tendientes a que mejore su condición”.
Villuendas González aseveró que en muchos de estos casos se puede intervenir si se identifica concretamente la alteración que produce el cuadro clínico y se ha podido constatar que el cerebro tiene una gran capacidad de reorganización.
Agregó que desafortunadamente la neurociencia se conoce poco y está rodeada por un prejuicio negativo que puede ser un problema, toda vez que cuando se habla de algo que incluye prefijo “neuro-” o de un diagnostico neuropsicológico, la primera impresión es que es un poco más serio que aquello que no es neuro.
“Esto tiene ciertos riesgos porque hay servicios y clínicas que se promueven para hacer diagnósticos con técnicas derivadas de la neurociencias y no necesariamente es lo mejor; hay muchos padecimientos que no requieren a la neuropsicología o la neuroimagen y que con un diagnóstico psicológico es suficiente”.
En este sentido hizo un llamado a la ciudadanía para ser cautos, ya que lo “neuro” no necesariamente es mejor que lo que no es “neuro”.
Asimismo, resaltó que su trabajo versa más sobre adultos jóvenes; sin embargo, los factores de riesgo para padecer algún evento vascular no dependen del estrato sino de la falta de cuidados respecto a la presión arterial, alimentación o la baja frecuencia del ejercicio.
“Si bien una buena parte de las enfermedades aplican para todas las capas sociales; ciertos padecimientos son más característicos de algunos sectores como la neurocisticercosis, que es más frecuentes en niveles bajos de ingresos por que las condiciones de higiene no son las óptimas”.
Finalmente, Erwin Villuendas enfatizó que los resultados de rehabilitación psicológica o cognitiva son bastante prometedores en muchos casos, considerando que el cerebro es un órgano sumamente delicado, plástico y resistente.
“La rehabilitación cognitiva tendría que estar mucho más presente y difundida entre la sociedad, toda vez que su presencia es ineludible en toda nuestra vida porque dependemos de nuestro cerebro”, concluyó.
