Resurge llamada del Consejero Jurídico de la Presidencia, Julio Scherer, pidiendo a banquero 30 millones de pesos para la campaña 2006

Resurge llamada del Consejero Jurídico de la Presidencia, Julio Scherer, pidiendo a banquero 30 millones de pesos para la campaña 2006
Autor: Redacción / Noventa Grados | Fecha: 23 de Agosto de 2020 a las 00:17:00

Ciudad de México, a 23 de agosto del 2020.- A través de las redes sociales circula una grabación que da cuenta de la llamada que sostuvo el hoy Consejero Jurídico de la Presidencia de la República, Julio Scherer Ibarra, solicitando al presidente del consejo de administración de la Banca Afirme 30 millones de pesos para concluir la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador en 2006.

En la conversación que data de 2006, Jorge Villareal Guajardo, propietario de Villacero, asegura a su interlocutor -al que se refiere como “tocayo”- que ya ha aportado a la campaña 50 millones de pesos por vías legales, además de otros 60 millones “por otro lado”.

Julio Scherer, hijo del periodista del mismo nombre, fundador de la revista Proceso, señala que a Villareal Guajardo lo estaba buscando el entonces dirigente del PRD, Jesús Zambrano, para pedirle el dinero para la campaña de su candidato, Andrés Manuel López Obrador.

“Déjame te digo, ya lo apoye con cinco cero hace 10 días”, dice Villareal Guajardo, haciendo referencia a 50 millones de pesos. “Ya se le entregó esa cantidad, ya apoyamos”

Indica que pese a esta importante suma, el dirigente del PRD le pidió otros 30 millones. “Ayúdalo”, ruega Julio Scherer.

“Me gustaría decirte que si tocayo, pero me boto todos los pinches candados, déjame ver qué puedo hacer”, responde Julio Villareal. “Todo el mundo va a responder ahí tocayo, pero va muy bien (la campaña)”, die Scherer.

El empresario se excusa diciendo que “Tú sabes que técnicamente en un tipo de negocios de esos si te descuidas en algo es malo, no hay reversible, si damos un pasito más allá… Este lo dimos con mucho cuidado, con mucha responsabilidad, y no nomas apoyamos por ahí, apoyamos por otro lado, eh”.

“También apoyé por otro lado, por el norte, porque también me vino la llamada del otro lado, esa cantidad que te mencioné, le sumas otro tanto y un poquito más. Esa cantidad que te mencioné, cinco cero, más seis cero”, dice el banquero.

A través de las redes sociales, el Consejero de la Presidencia de Andrés Manuel López Obrador dijo que por esa llamada, filtrada por la dirigencia del PRI en 2012, él interpuso una denuncia.

Dijo que se trató de la solicitud de un préstamo para la campaña presidencial, lo cual estaba permitido por la ley.

“El PRD me pidió que interviniera para que se ampliara un crédito hasta por 30 millones de pesos para terminar la elección, así se lo comenté a Julio Villarrreal por teléfono y Julio me dijo que era imposible porque ya se le había entregado un crédito al PRD hasta por 50 millones de pesos”.

Sin embargo, no mencionó nada de los apoyos por 60 millones de pesos, que aseguró Villareal haber hecho “por otro lado”.

“Tengo la impresión que esta es parte de la guerra que se está haciendo para poner a todos en el mismo sitio”, dijo Scherer Ibarra, recordando la filtración de dos videos en los que el hermano del presidente Andrés Manuael López Obrador, Pío López Obrador, recibe 1.4 millones de pesos de manos del hoy funcionario federal David León Romero, además de acordar la entrega de un millón de pesos más.

Tanto el funcionario como el Presidente confirmaron la entrega del dinero para apoyar al partido político Morena en Chiapas con miras a las elecciones 2015, lo cual representa una violación a la Ley General de Partidos Políticos, que prohíbe las aportaciones en efectivo mayores a 6 mil pesos, y pide el registro y fiscalización del origen de los recursos, cosa que al parecer no se hizo.

En ese entonces, David León Romero se desempeñaba como asesor del gobernador de Chiapas Manuel Velasco, aunque se presentaba como jefe de Comunicación Social del gobierno estatal. A la Administración de Velasco, el gobierno de López Obrador le perdonó, a través de la Auditoría Superior de la Federación y en un proceso de dos días de duración, un desvío de 635 millones de pesos.

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