En sociedades con una mayor cultura científica, la violencia es menor: Salvador Jara

Morelia, Mich., a 18 de noviembre de 2014.- Al inaugurar el XX Congreso Nacional de Divulgación de la Ciencia y la Técnica, el gobernador de Michoacán, Salvador Jara Guerrero subrayó la importancia social del divulgador en razón de que “en las sociedades que tienen un componente muy importante de cultura científica, la violencia es menor”, por lo que aseveró que “las actividades más bellas que puede realizar un ser humano son: hacer ciencia y divulgarla”.

Más de 200 divulgadores extranjeros y del país participarán en este Congreso, que se desarrolla en el Centro de Convenciones y Exposiciones en Morelia del 18 al 20 de noviembre, donde reflexionarán en torno a la comunicación pública de la ciencia y la sociedad del conocimiento a través de conferencias, ponencias, talleres e intercambio de experiencias prácticas.

Con amplia trayectoria en el ámbito de la ciencia, el gobernador Salvador Jara Guerrero inauguró este encuentro con una conferencia magistral en la que habló de la relevancia de la ciencia y la tecnología en la vida practica de las sociedades, cuyos efectos podrían resumirse en que gracias a los avances científicos se ha logrado aumentar la expectativa de vida de las personas, y elevar su calidad de vida, aún en sectores marginados.

Además de subrayar la importancia del conocimiento para la vida práctica, el ex rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) subrayó que en el mundo social la ciencia lleva implícito un principio de paz, ya que en contraparte, la principal causa de muertes violentas a lo largo de la humanidad ha sido el dogma ideológico, y la defensa de una verdad como algo irreductible que escapa al raciocinio.

“La verdad científica es una especie de certidumbre moral”, afirmó Salvador Jara y refirió que con la ciencia se construye un modelo de cómo funciona el mundo, “con la conciencia plena de que no tenemos la verdad absoluta, y esto permite una flexibilidad muy importante” para armonizar la convivencia social, aún en el disenso.

Durante su intervención en el acto inaugural, Jorge Padilla González del Castillo, presidente de la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y Técnica (Somedicyt), afirmó que el tránsito de México hacia una sociedad del conocimiento y una economía basada en el conocimiento, es indispensable para competir con éxito en el mundo actual, generar riqueza y desarrollo socioeconómico incluyente, “que tome en cuenta las necesidades de las mayorías desfavorecidas en un contexto de paz y justicia”.

Añadió que en una sociedad con débil cultura científica, con un pensamiento crítico deficiente y una pobre participación informada de los ciudadanos, sería inconcebible hablar de una economía fundada en el conocimiento, con principios de justicia social y una participación ciudadana responsable.

La directora del Consejo Estatal de Ciencia, Tecnología e Innovación de Michoacán (CECTI), Esther García Garibay, coincidió en que en una economía globalizada los divulgadores de la ciencia constituyen un elemento crítico para el desarrollo de cualquier país, ya que éstos contribuyen a impulsar la educación de calidad en la que se fundan las posibilidades de conocimiento y crecimiento de una sociedad.

Por su parte, y en representación del presidente del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Luis Gabriel Torreblanca Rivera, celebró que en este Congreso se dedique espacio para reflexionar sobre el tema de la innovación, ya que ésta permite aprovechar el conocimiento que se genera en la ciencia al activar el círculo de la economía del conocimiento.

Durante la inauguración del Congreso, la Somedicyt entregó el Premio Nacional de Divulgación de la Ciencia 2014 “Alejandra Jaidar” a la divulgadora de origen checo, Alexandra Sapovalova, en reconocimiento a sus aportes para fomentar una sociedad del conocimiento mediante diversas iniciativas que han tenido su desarrollo en Michoacán, como es el caso del Tianguis de la Ciencia de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, y el programa Ciencia para niños y sus papás, entre otras.