Nahuatzen, Mich., a 5 de abril de 2024.- A siete años de la masacre en la comunidad indígena Arantepacua, municipio de Nahuatzen, donde cuatro pobladores fueron ejecutados y otro miles fueron víctimas de tortura y otros actos de represión del gobierno entonces encabezado por Silvano Aureoles Conejo, hoy candidato a senador, comuneros se manifestaron en Morelia, llegando al vandalismo.
El 5 de abril de 2017, hubieron 4 ejecuciones extrajudiciales, 10 casos de tortura, 38 de tratos crueles e inhumanos, 48 detenciones arbitrarias y más de mil víctimas directas del ataque por el estado de sitio y el terror que provocaron agentes de la Secretaría de Seguridad Pública encabezada entonces por el compadre de Silvano Aureoles, Juan Bernardo Corona Martínez, exdiputado y exdirigente del PRD en la entidad.
Aunque la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ordenó al gobierno de Aureoles emitir una disculpa pública y reparar el daño a las víctimas, el ahora aspirante a Senador en activa campaña proselitista, se negó a acatar la orden y llamó a esa comunidad “refugio de criminales”. La Fiscalía del estado sí aceptó la recomendación y ofreció disculpas públicas.
A siete años de los hechos, los comuneros de Arantepacua se trasladaron a Morelia.
Por vialidades principales y en el Centro de la capital michoacana, los manifestantes marcharon y se enfrentaron a policías, quemando autos, vandalizando oficinas y edificios públicos.