El perro más viejito del mundo muere a los 31 años de edad; consiguió un récord Guinness

El perro más viejito del mundo muere a los 31 años de edad; consiguió un récord Guinness
Autor: Redacción / Noventa Grados | Fecha: 23 de Octubre de 2023 a las 13:16:32

Portugal, 23 de octubre del 2023.- Cuando se habla de un perro longevo, generalmente es un animalito de entre 13 y 17 años de edad, no obstante, Bobi, un lomito de la raza mastín de Alentejo, murió este fin de semana a los 31 años y 165 días de edad.

Esta noticia se volvió viral luego de que el can rompió el récord Guinness como el perro más longevo del mundo, cuando tenía 30 años de edad, lo cual no pasó desapercibido en el mundo.

El perrito nació un 11 de mayo de 1992 en la localidad lusa de Conqueiros, situación cual fue verificada por el Servicio Médico-Veterinario del Ayuntamiento de Leiria, que confirmó su fecha de nacimiento.

Así mismo, la edad de Bobi también fue verificada por la SIAC, que es una base de datos de animales de compañía autorizada por el gobierno portugués, la cual es gestionada por el Sindicato Nacional de Médicos Veterinarios en Portugal (SNMV).

Dentro de la historia del canino, se detalló que nació en una camada de cuatro cachorros, pero como la familia de sus dueños ya tenía demasiados animales, el padre decidió no quedárselos.

Debido a ello, decidieron llevarse a los cachorros, pero de manera accidental dejaron a Bobi, quien permaneció escondido entre un montón de leña almacenada en el lugar donde nació, por lo que no lo vieron.

El lomito fue descubierto por los niños de la familia, quienes mantuvieron en secreto la existencia del cachorro y para cuando sus padres se dieron cuenta de la existencia de Bobi, ya era demasiado tarde para sacrificarlo, así que pasó a formar parte de la familia.

En cuanto a su longevidad, el propietario del can, de nombre Leonel, refirió que el entorno "tranquilo y pacífico" en el que vivía Bobi contribuyó a que batiera su récord de edad, además de que nunca estuvo amarrado, encadenado ni sujeto a correa, como se acostumbra con los perros domésticos.

Así mismo, indicó que la dieta de Bobi también contribuyó a su longevidad, ya que se alimentaba exclusivamente de comida humana.

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