Michoacán, sometido a sangre y fuego por al menos 10 grandes grupos criminales: Del cobro de piso a la guerra de cárteles

Michoacán, sometido a sangre y fuego por al menos 10 grandes grupos criminales: Del cobro de piso a la guerra de cárteles
Autor: Redacción / Noventa Grados | Fecha: 29 de Julio de 2020 a las 18:03:00

Morelia, Mich., a 29 de julio del 2020.- Haciendo uso de la extrema violencia y protegidos por la corrupción de los tres órdenes de Gobierno, al menos 10 grandes grupos criminales mantienen controlada la geografía michoacana con un amplio catálogo de delitos, que van de la tala clandestina, la producción y venta de droga hasta el asesinato y la desaparición de personas de todos los sexos y edades.

Estos grupos delictivos son Los Viagras, Cártel Jalisco Nueva Generación, Cártel de Tepalcatepec, Caballeros Templarios, Familia Michoacana, Blancos de Troya, Cártel Independiente y/o del Señor de la Virgen, Cártel de Zucuirán, el grupo que encabeza Gabino Barrera en Churumuco y el grupo criminal que opera en la Sierra - Costa de la mano de El Toro, El Teto y El Marino.

En el caso de la capital de Michoacán,  sede de los tres Poderes de la entidad, se ha detectado la operación de los dos mayores cárteles que operan en el estado, Los Viagras y el Cártel Jalisco Nueva Generación, que además de controlar la venta de droga, son responsables de asesinatos, secuestros y ejecuciones, e incluso han colocado narcomantas en múltiples ocasiones.

Se sabe que el Cartel Jalisco incluso se ha infiltrado en los cuerpos de seguridad pública de la entidad, como reveló la ejecución de una familia, integrada por un miembro del CJNG, una mujer policía estatal y su hija de un par de años de edad, el pasado mes de mayo al norte de la ciudad de Morelia.

En los municipios de los alrededores, en especial Tarímbaro y Cuitzeo, el robo de combustible de los ductos de Pemex es también una actividad a la que se dedican Los Viagras, quienes han establecido una alianza con uno de los mayores grupos dedicados a esta actividad en el país, el Cártel Santa Rosa de Lima.

En la región Lacustre,  que contempla los municipios de Pátzcuaro, Erongarícuaro, Quiroga, Tzintzuntzan, Salvador Escalante, Huiramba y Madero, principalmente operan Los Viagras, controlando los delitos ambientales (tala clandestina y aserraderos) y la venta de droga, aunque narcomenudistas del CJNG también tienen su zona de “trabajo” principalmente en Pátzcuaro.

En la Meseta Purépecha (Charapan, Cherán, Chilchota, Nahuatzen, Nuevo Parangaricutiro, Paracho, Tancítaro, Taretan, Tingambato, Uruapan y Ziracuaretiro), igualmente los delitos ambientales están controlados por el crimen organizado, sumándose la extorsión a los aguacateros y robo de vehículos que transportan aguacate, así como el secuestro.

En la principal ciudad de la región, Uruapan, Los Viagras y el Cártel Jalisco protagonizan una guerra de extrema violencia por el control del territorio, que colocan a ese municipio como uno de los más violentos de la entidad, aunque también operan células de los Caballeros Templarios y otras bandas dedicadas al robo de vehículos.

En el Oriente, (Angangueo, Aporo, Contepec, Epitacio Huerta, Hidalgo, Irimbo, Juárez, Jungapeo, Maravatío, Ocampo, Senguio, Susupuato, Tiquicheo, Tlalpujahua, Tuxpan, Tuzantla, Tzitzio y Zitácuaro) los delitos ambientales y la venta de droga son la principal actividad de los grupos delictivos.

En esa región, colindante con el Estado de México, y cuna política de la cúpula zitacuarense que hoy gobierna la entidad, existe una fuerte influencia de La Familia Michoacana, aunque también son fuertes los intereses políticos por lo altamente productiva que es la región en cuanto a la siembra de aguacate y bayas (fresas, zarzamora, mora y arándano) y la ricos bosques donde se asienta la Biósfera de la Mariposa Monarca.

Tan solo este año, dos ambientalistas de la región han sido asesinados, siendo uno de estos casos el del ambientalista Homero Gómez, quien se reunió con políticos locales con fuerte influencia en la Administración del gobernador Silvano Aureoles Conejo, antes de desaparecer. Ambos crímenes hoy están impunes.

En tanto, en el Occidente, integrado por los municipios de Zamora, Jiquilpan, Chilchota, La Piedad, Sahuayo, Tangancícuaro, Ecuandureo, Jacona, Briseñas, Tingüidín, Yurécuaro, Tangamandapio, Cotija, Tocumbo y Cojumatlán, operan Los Viagras, el CJNG, El Cártel Independiente y/o Del Señor de la Virgen, Cártel de Tepalcatepec y otras células criminales que constantemente cambian de bando.

Zamora es actualmente el municipio más violento de Michoacán y catalogado en varias ocasiones como uno de los más peligrosos del mundo por la cantidad de homicidios que se cometen respecto al tamaño de  su población.

En la región, el cobro de piso, venta de droga, extorsión, secuestro, asesinatos y desapariciones, son la constante desde hace varios años, e incluso el pasado mes de junio, el Director de la Policía que impusieron el gobernador Silvano Aureoles y su secretario de Gobierno, Carlos Herrera Tello, fue asesinado sin que hasta la fecha haya detenidos o algún avance en la investigación.

En la región Costa (Aquila, Arteaga, Coahuayana, Coalcomán de Vázquez Pallares, Chinicuila, Lázaro Cárdenas y Tumbiscatío), los principales generadores de violencia y operadores del crimen son Germán Ramírez Sánchez alias “El Toro”, Héctor Zepeda Navarrete “El Teto” y Ángel Custodio Cuevas Arredondo “El Marino”, responsables de secuestros, asesinatos, desapariciones, saqueos, quienes se encargan además de la recepción de droga que llega de Sudamérica a la Costa michoacana, y su posterior trasiego para grupos mayores del narcotráfico.

El control sobre las minas y el tráfico de madera, muy codiciana en mercados como el chino, se han convertido en una fuente de violencia que ha generado asesiantos y el desplazamiento de las familias.

Por último, en la franja del valle de Tierra Caliente (Apatzingán, Múgica, Buenavista, Parácuaro, La Huacana, Tepalcatepec, Aguililla, Gabriel Zamora, Nuevo Urecho, Huetamo, Turicato, Tiquicheo, Tuzantla, Nocupétaro, Carácuaro, Churumuco y San Lucas) se asientan las cabezas de los grupos más peligrosos de la entidad. Desde esa región se controla la guerra de los grupos delictivos, sus alianzas y sus operaciones delictivas.

De esa región es originario el Gobernador de la entidad (Carácuaro) y alcalde un hermano suyo, Juan Luis García Conejo, que dirige el Ayuntamiento de Huetamo. En este último municipio y San Lucas, el Cártel Jalisco Nueva Generación y La Familia Michoacana se disputan el control territorial.

En la Tierra Caliente también surgieron Los Viagras, grupo criminal que encabezan los hermanos Sierra Santana, originarios de Pinzándaro, municipio de Buenavista, y en Aguililla nació el líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”.

Juan José Farías “El Abuelo”, “objetivo prioritario” del gobierno estatal, encabeza el Cártel de Tepalcatepec y ha operado impunemente durante toda la actual Administración perredista, y antes de ella.

En Churumuco es el clan de los hermanos Barrera Estrada el que controla las actividades delictivas en ese municipio, destacado por la producción de metanfetamina que se distribuye en México y se exporta a Estados Unidos. Rodimiro es Presidente Municipal y su hermano Gabino, líder de su propio grupo, hasta hace unos meses asociado con Los Viagras.

En La Huacana se asienta Miguel  Ángel Gallegos Godoy “El Migueladas”, fuerte pero discreto líder delincuencial al frente del Cártel de Zicuirán.

Los Blancos de Troya, Caballeros Templarios y Familia Michoacana operan como brazos armados de Los Viagras e incluso realizan su propia ofensiva contra el Cártel Jalisco en el corredor Aguililla – Apatzingán, dirigidos por César Sepúlveda Arellano alias “El Botox” y/o “El Boto”.

Mientras que surgido en Apatzingán, el Cártel Independiente o Del Señor de la Virgen, que encabeza “El Barbas” desde la comunidad de Acahuato, ha avanzado hacia el norte de la entidad generando una gran violencia en el municipio de Tangancícuaro al combatir con el CJNG.

En el Valle de la Tierra Caliente, región rica en ganadería y producción de frutos como el limón, la papaya y el mango, se encuentran los laboratorios de metanfetamina que por su bajo costo de producción, alta capacidad adictiva y buen precio en el mercado negro, genera millonarias ganancias para los cárteles tanto en Estados Unidos y México.

Pero no solo eso, sino que los grupos criminales se han valido de la extorsión, el secuestro, el robo de tráileres y el cobro de piso generalizado para hacerse de recursos, cometiendo además violaciones (incluso de menores de edad), desapariciones y asesinatos.

La lucha por el control territorial es también una constante, formándose y rompiéndose alianzas, cometiéndose traiciones y quedando las poblaciones en medio de toda esta inestabilidad, abandonadas por sus autoridades municipales y estatales, e indefensas ante la corrupción de los tres órdenes de gobierno que se venden al mejor postor.

Más información de la categoria
Más información de la categoria
Comentarios