Cuando la palabra no sirve

Morelia, Mich. a 26 de julio de 2017.- Cuando la palabra, el señalamiento constante y verdadero, pareciera solo molestar en lo personal y no en lo institucional, podríamos decir que “la palabra no sirve”, deberíamos entonces callar y permitir que los funcionarios corruptos continúen su libre andar.

El cansancio de escribir, y no ver acciones concretas en contra de gente mala y corrupta, que violenta nuestras garantías individuales, nos hace creer eso, no dice que no haremos la diferencia, que debemos transformarnos como los demás y callar; callar porque de cualquier forma lo van a conseguir, van a callar las voces de los que si hablamos, de los que si señalamos de forma directa a José Martín Godoy Castro, como autor intelectual de la nula equidad de justicia de nuestro estado. 

Cuando a través de las palabras se lastiman poderosos intereses económicos, es de esperarse la reacción acéfala de gente de esta calaña, el tener dinero en el bolsillo y pobreza en la cabeza es una mala combinación. Las amenazas en contra de José Maldonado, no son cosa nueva, lo que si es de extrañar es que ahora lo hagan público.

Sabemos que esta gente regularmente logra su cometido, deberán las autoridades demostrar ahora,que de verdad funcionan sus estrategias de protección a periodistas y a los activistas sociales, deberán demostrar que no permitirán ni un muerto más, porque ningún asesino, si no es la ignorancia, jamás podrá matar la letra.