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MensajearMéxico, D.F., a 29 de agosto de 2015.- En México cada año se diagnostican cinco mil nuevos casos de cáncer en niños de cinco a 14 años de edad, por lo que es necesario fortalecer la capacidad de diagnóstico oportuno, mejorar la atención y abatir el abandono del tratamiento, consideró Eduardo González Pier.
El subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud explicó que el cáncer infantil es uno de los padecimientos que más gasto económico ocasionaba en la población.
Durante la inauguración del “Coloquio de Medicina Personalizada: una necesidad real”, recordó que desde su incorporación al Seguro Popular se logró aumentar la sobrevida porque los pacientes ya no tienen que abandonar el tratamiento por falta de recursos.
González Pier refirió que en el Instituto Nacional de Medicina Genómica, el cáncer infantil se reconoce como una prioridad en la agenda de la política pública de salud.
En ese sentido, explicó que la atención que se brinda incluye la protección de los riesgos financieros, prevención, detección temprana, atención oportuna y de calidad, así como rehabilitación y cuidados paliativos.
Subrayó que la Secretaría de Salud (SSA) se fortalece la capacidad de diagnóstico oportuno para la detección de síntomas y signos de cáncer, mediante la capacitación de médicos en el primer nivel de atención.
“Independientemente de donde se ubiquen, a los pacientes se les da el mejor tratamiento en unidades acreditadas, con apego a protocolos, y se capacita a médicos y enfermeras especializadas, además se busca abatir el abandono con la mejor red posible de soporte, apoyo alimenticio y emocional”, puntualizó.
Resaltó que a partir de la creación del Consejo Nacional para la Prevención y Tratamiento de Cáncer de la Infancia y la Adolescencia en 2005, todos los estados mantienen activos sus consejos de prevención de ese padecimiento y además se cuenta con 69 instituciones públicas acreditadas que atienden a los pacientes.
Por otro lado, González Pier destacó el trabajo de las organizaciones de la sociedad civil como la Casa de la Amistad, que desde hace 25 años apoya en el tratamiento a los menores con cáncer, así como a sus familiares a través del transporte, alojamiento y alimentación.
