La Minuta SEE-SEGOB-CNTE 2015

Pese a que año tras año se compromete la autoridad estatal a no firmar más minutas con la CNTE, en esta ocasión volvió a ocurrir tal atrocidad, en la que olvidan defender el patrimonio estatal, así como cumplir y hacer cumplir la ley, para entregarse a las mieles de la connivencia con la CNTE. El pasado 17 de junio iniciaron los trabajos bilaterales al respecto que concluyeron al día siguiente con la firma de la minuta SEE-SEGOB-CNTE 2015, donde se vuelven a comprometer recursos económicos millonarios para seguir insuflando vida artificial a las actividades tan propias de la CNTE y a transgredir la normatividad educativa vigente a nivel nacional, por lo cual resulta incalculable el monto del quebranto que se acumulará durante la vigencia de ese documento en el cual se extralimitan en sus funciones los servidores públicos que rubricaron la minuta, tal y como ha ocurrido en años anteriores y que a la fecha mantienen postrado a Michoacán tanto en logro educativo, en corrupción como en déficit financiero.

Este lunes 22 de junio, la CNTE a través de sus órganos de comunicación dio a conocer, como lo ha realizado año tras año, el contenido de la minuta de acuerdos establecidos entre el Gobierno del Estado a través de la SEE y el Comité Ejecutivo Seccional de la Sección XVIII de la CNTE. Específicamente, se menciona que el pasado 17 de junio de 2015, en la Secretaría de Gobierno, se reunieron liderazgos de la Sección XVIII de la CNTE con el Lic. Jaime Ahuizótl Esparza Cortina, Secretario de Gobierno del Estado, el Dr. Armando Sepúlveda, Secretario de Educación en el Estado, el C.P. Miguel López Miranda, Secretario de Finanzas y Administración del Estado, quienes al día siguiente signaron una minuta de 19 puntos, en donde se comprometen entre otras cuestiones a dar seguimiento a la Minuta 2014; a que el Gobierno del Estado siga siendo la parte patronal de los trabajadores de la educación, intentando evadir con ello una posible federalización de la nómina magisterial, con lo que tendrían que sujetarse a las reglas nacionales, concluyendo con el estado de excepción en el que laboralmente se encuentran; a “establecer un programa de saneamiento y orden en la administración de la SEE” con criterios que no se definen en el documento, con lo cual puede avizorarse un posible despojo operado desde la parte institucional y capitalizado por la instancia gremialista; se incrementará un 150 por ciento el presupuesto para la impresión de libros de texto gratuitos obsoletos de 1993; se operará una matriz de distribución que contempla recursos para construcción y mantenimiento de escuelas alejadas de la reforma educativa; se incrementará en cinco millones la bolsa de bonos para los jubilados; serán equipadas, dotadas de infraestructura y beneficiadas en general las escuelas integrales, programa creado por la CNTE para ejercer control de tiempo completo sobre las comunidades escolares, a la par que para obtener privilegios y mejores plazas para la élite protegida de la CNTE que trabajará en tales centros educativos; a regularizar a los trabajadores de la educación, incluyendo las propuestas temporales realizadas por la CNTE; a entregar bonos de toda índole; a promover proyectos sociales productivos, comunitarios o escolares; a la asignación de recursos para programas socioeducativos administrados por ellos y operados a su arbitrio; a continuar el programa de apoyo a la jubilación, pero desconociéndose que se hace con las plazas que se liberan mediante tal estímulo; asimismo, en el epítome del absurdo, el Gobierno del Estado se compromete a colaborar y aportar permanentemente los recursos para la mejora de las condiciones de vida de todos los trabajadores de educación básica, del nivel medio-superior y superior y de pensionados y jubilados en función del presupuesto, es decir: las finanzas estatales destinadas para mejorar exclusivamente la economía de menos del 2 por ciento de la población estatal; también se torcerán la Reforma Educativa y la Ley Federal del Trabajo al decirse que no se ejercerá contra los trabajadores de la educación “represión administrativa, laboral, física o de cualquier otra modalidad por su participación en la jornada de lucha magisterial”, entre otras cuestiones inaceptables. Resulta verdaderamente obvio delinear las razones de lucro subyacentes en cada uno de los puntos firmados.

Por esta razón, la autoridad estatal, a través de todos los medios a su alcance dio a conocer que el paro indefinido de la CNTE concluyó y que maestros y alumnos volvieron a las aulas. Pero víctimas de un ataque de amnesia selectiva olvidaron informar al pueblo de Michoacán que una vez más, extralimitados en sus funciones y de espaldas a la

sociedad, firmaron una minuta de acuerdos que compromete recursos y normatividad con la disidencia magisterial, así como rendir cuentas de cara al pueblo especificando detalladamente los términos y condiciones del oprobioso acuerdo. En el colmo de los absurdos, es en nuestra kafkiana realidad la propia la CNTE quien año tras año nos informa a los michoacanos de sus conquistas sindicales, a la par que nos entrega la factura con cargo a la ignorancia de nuestros hijos.

Por todo lo anterior, al tener la minuta en la bolsa, la marcha del viernes 19 de junio ya fue testimonial. Haber negociado con las organizaciones que componen el Frente Cívico Social bajar su perfil y marchar solamente bajo el slogan de la CNTE no fue sino un alarde, ya que solamente simularon exigir para enviar mensajes de chantaje y músculo político al gobernador electo.

Después de todo lo relatado, usted amable lector, ¿está de acuerdo en que la autoridad continúe firmando minutas en las que se compromete a invalidar la ley y a entregar recursos económicos de maneras oscuras y a modo para que la CNTE disponga de ellos? Ni la reforma educativa ni un nuevo comienzo deben incluir vicios del pasado y del presente tales como la firma de minutas.

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