Tránsito de Michoacán “desaparece” coche en Morelia: Lo hallan en corralón y le cobran más de $5 mil a su dueño

Morelia, Mich., a 2 de junio del 2020.- Un auténtico calvario sufrió un ciudadano luego de que su vehículo fuera arrastrado y llevado a un lugar desconocido, en aparente beneficio de empresarios de las grúas, pues los agentes de Tránsito y Movilidad que intervinieron en su remisión, ni multa le dieron. Luego de buscar con los gruyeros de Morelia, pagar sobornos y visitar autoridades, Jaime Loeza logró encontrar su auto y lo tuvo de regreso, tras pagar miles de pesos por la corrupción.
 
Jaime contó su historia a Noventa Grados, siendo una víctima más de la Dirección de Movilidad y Tránsito de Michoacán y de los gruyeros particulares, que sostienen una red de corrupción de alto nivel.

El afectado relató que el jueves de la semana pasada mandó su auto a un taller de su confianza para reparación. Del establecimiento le llamaron el día sábado, para decirle que policías y una grúa se llevaron su vehículo, sin motivo aparente y sin dejar ningún ni un papel.

Fue así que comenzó la búsqueda del auto sin pista alguna de dónde pudiera estar, temiendo el afectado que su auto hubiese sido robado. Usando Jaime sus contactos e influencias, visitando varios negocios y luego del pago de un soborno a un trabajador de un corralón, logró confirmar que su vehículo estaba en un depósito de “Grúas Juárez” en la salida a Pátzcuaro.

Ya sin la preocupación de no saber dónde estaba su propiedad, Jaime se dirigió a la Fiscalía del estado para que le extendieran la liberación de su vehículo, pero el proceso se complicó pues no tenía ningún documento de la remisión del vehículo al corralón y nadie sabía qué agente realizó el procedimiento.

Por ello Jaime pidió a una empleada de “Grúas Juárez”, el nombre del agente y número de patrulla que realizaron la remisión, pero una consulta a las autoridades correspondientes, arrojó que ni la persona ni la patrulla existían.

Ante las insistentes llamadas de Jaime al corralón, le dijeron que no tenía nada que hacer en la Fiscalía, que acudiera a sus oficinas y ellos le daban su vehículo, sin mediación de la autoridad.

Esto, en un evidente acto de corrupción, pues al supuestamente el auto ser remitido al corralón por la Policía, la Fiscalía del estado debía extender el documento de liberación, pero no fue así.

Una vez en las oficinas de “Grúas Juárez”, empresa que se maneja con este nombre, aunque factura como “Auxilio Vial De Mexico Del Bajio S.A. De C.V.”, Jaime se llevó la sorpresa de que por el arrastre de su vehículo no serían $950 pesos los que tendría que pagar, como indica un anuncio con los precios que se encuentra en el negocio, sino que le cobraron $5,320, por el trayecto de la avenida Siervo de la Nación -donde el vehículo fue ‘levantado’- al kilómetro 7 de la salida a Pátzcuaro.

En el lugar le dijeron que el sobrecosto era pues ellos habían tenido que llevar el vehículo a la Fiscalía, para que comprobaran su información, lo que implicaba más tiempo y traslados.

Ese negocio, que se presenta con los nombres de “Grúas Monarcas”, “Grúas Zacapu” y “Grúas Juárez”, tiene un convenio con la Dirección de Tránsito y Movilidad del estado, para remitir a sus corralones los vehículos arrastrados.

El presunto compadrazgo entre el dueño de ese negocio con el gobernador Silvano Aureoles Conejo y el encargado de despacho de Tránsito del estado, Jorge Alvarado Serrato, serían lo que explica el abuso de los agentes de esa Dirección, reflejada en cientos de denuncias ciudadanas, y la extorsión de los gruyeros particulares que saltándose hasta a la Fiscalía del estado imponen tarifas exageradas a cambio de los bienes de los ciudadanos víctimas de la corrupción, lo que se mantiene en absoluta impunidad aunque múltiples veces se ha denunciado.

Cabe señalar que ante la constitución de un nuevo cuerpo policiaco, que se encargaría de las carreteras del estado, el cuestionado Jorge Alvarado Serrato, protegido del gobernador perredista SIlvano Aureoles y del secretario de gobierno Carlos Herrera Tello, asumiría la dirección de esa nueva corporación policiaca, según presume él mismo, se dice entre los uniformados.