Sin maquillaje... ¿Destinatario?

Sin maquillaje... ¿Destinatario?
Autor: Etelberto Cruz Loeza / Noventa Grados | Fecha: 25 de Julio de 2016 a las 09:03:00

Morelia, Mich, 25 de julio de 2016.- Julio es un magnífico escaparate escenográfico para las simultáneas en el certamen Reforma Educativa que enfrenta el Estado mexicano con la llamada CNTE y los embozados.

En este mes, algunos miembros de la autollamada comentocracia nacional hicieron alusión a que la Reforma Educativa sí se podía reformar y presentaban varias argumentaciones cuya conclusión era lo factible de las reformas a la Reforma Educativa.

Uno de ellos fue Jorge Castañeda Gutman. Y pareciera que fue el clarín de órdenes y unos hoy y otros al día siguiente, pero como corito, todos coincidían en la factibilidad de reformar la Reforma Educativa.

Y, vamos, es y será cierto, que todas las leyes y todos los códigos pueden ser reformados. Y como ejemplo está nuestra Constitución política de 1917; ese código es diametralmente opuesto a la actual: perfilaba un Estado, protagonista, y una sociedad muy diferente a la actual, con un Estado como testigo, no protagonista como el Estado surgido y perfilado por el código de 1917. Para adecuarla, ajustarla a las condiciones cambiantes del mundo de la posguerra y ahora de la globalización se le han propuesto y acordado cuantioso número de reformas que la han transformado y es muy diferente a la de hace 99 años.

Lamentablemente, en esta simultánea, el contrincante radical, subversivo y hasta delictivo, utilizó la vía de la confrontación porque tenía - ¿tiene? – otro fin, que no es ganar, sino negociar y no la vía institucional, la legal: elaborar un conjunto de propuestas para que sus pares en ideología le dieran forma y fueran presentadas como iniciativas en el H. Congreso de la Unión y se discutieran en la llamada tribuna más alta del país.

¿Por qué no lo hicieron?

No hay respuesta más que los hechos: la confrontación, las conductas delictivas, la sangre y los muertos para postrar al estado y negociar privilegios que la aplicación de la ley no puede darles, pero la negociación, sí.

Lo único malo es que el Estado, con sus diferentes varas para la aplicación de la justicia, muestra que la única táctica y estrategia político-administrativa que genera resultados es la acción radical y la confrontación, porque algo deja. ¿O sabe algo que es crítico?

Por esas coincidencias curiosas de la política, que se dice no existen en ella, varios diputados federales y senadores de la República, identificados con la CNTE y con AMLO, ya iniciaron trabajos previos para darle forma a iniciativas que presentarán en el H. Congreso de la Unión para que sigan el procedimiento normal.

Lo cierto es que en esta parte del juego de simultáneas el Estado mexicano tiene la iniciativa y mueve sus caballos, torres, dama, alfiles y peones en una vía con dos y hasta tres partidas=vertientes: la política – con gobernación&CNTE –, la técnico-educativa - SNTE.-SEP - y la de comunicación social, con la dirección, contenido y manejo de la información. Y como están las piezas en el tablero político hay un no declarado jaque y está a punto de darle mate y ganar.

Coincidentemente con este escenario, el presidente nacional de MoReNa, Andrés Manuel López Obrador, conversando el jueves 14 del presente con Ciro Gómez Leyva, habló muy claramente, con visión de Estado, tremendista e inesperados, inusuales en él.

Afirmó: Entender que las leyes se hacen para los seres humanos, no los seres humanos deben estar subordinados a las leyes. Fue un error plantear que no se le iba a quitar ni una coma, que todo estaba muy bien. Hay que tener capacidad para rectificar, no caer en la autocomplacencia. Derogar la reforma educativa como lo proponen los maestros de la CNTE, representaría la claudicación del gobierno. No se puede derogar. Sería la claudicación del gobierno. No se trata de jugar a las vencidas. El gobierno tiene que aceptar que se equivocó al no consultar a maestros y padres de familia cuando se aprobó esta ley o el paquete de leyes que se conoce como reforma educativa, y la responsabilidad recae en el Poder Legislativo, porque ahí fue donde se aprobó. PEDIR QUE SE DEROGUE LA REFORMA ES LA CLAUDICACIÓN DEL GOBIERNO. NO NOS CONVIENE A NADIE. NOSOTROS NO QUEREMOS CONSTRUIR EL NUEVO MÉXICO A PARTIR DE ESCOMBROS. TIENE QUE HABER AUTORIDAD Y TENEMOS QUE LLEGAR AL 2018 CON ESTABILIDAD, CON PAZ SOCIAL PARA QUE LA ENTREGA DE LA ESTAFETA SE DÉ EN UN AMBIENTE DE NORMALIDAD POLÍTICA. Que se hagan las modificaciones correspondientes con la participación de todas, de todos. Que se haga lo que no se hizo. Que se llame a los maestros. Que se llame a los padres de familia, a los especialistas. Que se les escuche y que se resuelva. SOLO DE ESTA MANERA SE PUEDE SERENAR EL PAÍS Y EVITAR LA CONFRONTACIÓN Y LA VIOLENCIA. NO HAY QUE ESTAR JUGANDO CON FUEGO, NO ES CONVENIENTE ESO, NADA POR LA FUERZA, TODO POR LA RAZÓN Y EL DERECHO. (Y miren lo que son las cosas: esto mismo se planteó, desde las primeras evaluaciones y por otras vías no sindicales ni de la CNTE y, recientemente, desde el 7 del presente, la SEP y el SNTE están trabajando por esta agenda. ¡Qué coincidencia!)

De las pocas ocasiones en que cambia su perfil de subversivo, de oposicionista para mostrar la faceta de político SERIO. Estos inusuales juicios son motivo de reflexiones y análisis en varias áreas.

Es correcto, preciso, en sus juicios iniciales. Es realista, y aceptable, al señalar deficiencias en la presentación de reforma educativa al señalar su condición de intocable. Es realista al afirmar que no se puede derogar; conoce el proceso de las iniciativas y manda un mensaje: por ahí no es. Pero sí es por aquí: en el H. Congreso. Es atinado, y político, al señalar que ambos poderes – Ejecutivo y legislativo -se equivocaron.

A donde deseo ir: lo que dejo en mayúsculas es una visión muy seria y puede tener varias lecturas, literal, analógica y anagógicamente.

1°.-No quiere que el gobierno claudique, que sea derrotado, que sea destruido. Él está seguro que tiene la razón. 2°.-Utilitarista y prácticamente no le conviene ni a él ni a nadie. 3°.-Tiene la visión y la percepción de que ganará las elecciones del 2018 y que no quiere partir de ruinas: la elección del 2018 será muy encarnizada y peleará - como López Portillo – como un perro voto por voto. 4°.-Andrés Manuel López Obrador no es Cuauhtémoc Cárdenas, ni se verá en dos escenarios: el de 1988 ni en el del 2006. 5°.-Andrés Manuel sí es capaz de levantar a buena parte del país; a esa parte del país insatisfecha, harta, con el humor social derramado, agresivo. Deduzco que él, en este tiempo que ha estado en encubierta precampaña presidencial, se ha encargado de regar polvorita y de abonar, fertilizar-agitar el descontento popular. 6°.-Existen condiciones para que así sea. Esto que estamos viendo es una mínima muestra en una región - 4 estados - de lo que podría ser el país dentro de dos años. 7°.- El trabajo de Fox Quesada, en coordinación con el CCE, presionando a las autoridades federales electorales en el 2006 lo agarró desprevenido. Ahora ya está preparado y debe tener simpatías en los círculos jurídico-electorales federales, y, acaso, entre los mandos superiores militares. 8°.-Si al cierre de los cómputos tiene una diferencia menor al 1% la percepción y visión serán de crisis. 9°.Es clara su sentencia-recomendación: no jugar con fuego. Todo por la razón y el derecho. El trabajo ya está hecho, para este momento. Desea mostrarse como hombre respetuoso de la ley, del Derecho y del Estado de Derecho. Esa figura de ¡AL diablo las instituciones! Está olvidada, pero en realidad no es así. 10°.-Necesita que el país, la sociedad esté en calma para que se dé, se formalice el cambio, la transición del poder. No es tonto, es subversivo, pero no tanto ni tonto.

¿Para quiénes es el mensaje?

​EN MEMORIA DE LA C.P. RUTH LOEZA MEDINA. DESCANSE EN PAZ

ALGUNA VEZ DIJE QUE LOS NUESTROS SON PUEBLOS DE MALA MEMORIA Y QUE LOS POLÍTICOS, LO QUE ES CIERTO, SON TIPOS DE POCA PALABRA. LA POLÍTICA DISPERSA Y ENVILECE A LOS HOMBRES. POR ELLA, LO BUENO Y LO MALO, QUE EN CIRCUNSTANCIAS NORMALES SE RECHAZARÍAN, SE HERMANAN. CÉSAR DARÍO. EL TIEMPO DE LA IRA. LUIS SPOTA.

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