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MensajearMorelia, Mich; 12 de mayo de 2017.- De acuerdo con Heliodoro Gil Corona, coordinador de proyectos estratégicos del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán (CEEM) “la economía de Michoacán durante 2016 reporta un sorpresivo rebote económico de 4.4 por ciento, desde un aumento marginal observado de 0.2 por ciento en 2015. El rebote económico observado supera a la tasa esperada estimada de dos por ciento para 2016, debido principalmente al incremento atípico de diez por ciento reportado en el cuarto trimestre del año pasado”.
El aumento anual, explicó el también académico “estuvo apoyado por un incremento de las actividades del campo de 10.1 por ciento, las industriales de 2.9 por ciento y los servicios de cuatro por ciento, en términos comparativos de 2015 a 2016 la actividad total, las actividades primarias, las actividades industriales y las actividades de servicios, manifiestan mejorías en sus desempeños durante el periodo. La clave del rebote económico es el repunte de las actividades vinculadas a las actividades del campo”.
En su estudio sobre el crecimiento atípico de la economía estatal registra que, en el cuarto trimestre del año pasado de 10 por ciento estuvo apoyado principalmente por incrementos acentuados en las actividades del campo y las industriales de 23.7 por ciento y 18 por ciento, respectivamente, con ello, la actividad económica estatal pasa de 1.8 por ciento a 10 por ciento de 2015 a 2016, correspondiente al cuarto trimestre “el incremento de las actividades económicas reportado en el cuarto trimestre de 2016 es un máximo histórico de crecimiento para igual periodo desde 2004”.
Los factores que explican tanto el rebote económico anual como el crecimiento atípico del cuarto trimestre de 2016 se deben al fuerte aumento del valor de la producción agrícola de 35.2 por ciento en términos reales; al incremento observado de 112.2 por ciento en la inversión pública federal para el desarrollo local y regional; al repunte de 30.2 por ciento de la inversión federal y privada en activos fijos; el alza relevante real de 21.2 por ciento de la industria alimentaria y el fuerte incremento de 28 por ciento del consumo interno mediante remesas familiares el año pasado.
Por ello, de acuerdo a Gil Corona “las expectativas para el cierre de 2017 se vislumbran en desaceleración económica, con una tasa de 1.5 por ciento, con un intervalo estadístico de tolerancia entre 0.5 y 2.5 por ciento, de esta manera la economía estatal transitará de un rebote económico de 4.4 por ciento registrado en 2016, a una tasa de crecimiento productivo de 1.5 por ciento en términos anuales”.
La desaceleración estimada, agregó, “obedece principalmente a la disminución de la inversión pública estatal y federal en el presente año de un (-) 25.5 por ciento, al bajar los recursos para obra pública de cuatro mil 609 millones de pesos a tres mil 435 millones de pesos de 2016 a 2017”.
Además “se incorpora en esta estimación los cambios en las políticas fiscal, comercial y migratoria de Estados Unidos, que son amenazas y efectos adversos que se han previsto en las exportaciones agrícolas y manufactureras, la inversión extranjera directa y las remesas familiares para la economía de Michoacán, a menores niveles que los reportados en 2016”.
