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MensajearNueva York, EE.UU., a 11 de enero del 2019.- La comitiva mexicana que se trasladó a Nueva York para presentar el proyecto financiero de Pemex a sus inversionistas, no causó una buena impresión entre los analistas financieros y se plantea que en los próximos días baje la nota crediticia de la empresa productiva del Estado.
A esta reunión asistieron el director de Finanzas de Pemex, Alberto Velázquez García, y el secretario de Hacienda y Crédito Público, Carlos Urzúa Macías, quienes se reunieron con los inversionistas en un hotel de la Gran Manzana.
Los temas más controversiales fueron los que se refieren a la construcción de una séptima refinería y mantener los márgenes de EBITDA (beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) de Pemex.
Sobre la refinería, se cuestiona su viabilidad financiera, máxime en un escenario global que apuesta por el uso de energías limpias sobre los combustibles derivados del petróleo.
Asimismo, los representantes de la comitiva mexicana no explicaron cómo se pretende financiar esta refinería, cuando la empresa tiene una deuda actual de 83 mil 900 millones de dólares.
También se puso en duda que Pemex pueda revertir el declive en la producción de petróleo crudo para alcanzar 2.45 millones de barriles de petróleo por día para 2024, como prometió el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Esto, por lo difícil que sería extraer petróleo de los yacimientos propuestos para ello, como es el de Ixachi, cuyas reservas son de dos tercios de gas y la compañía necesitará perforar a profundidades de 7 kilómetros para acceder a ellos, cosa que no se ha hecho en 40 años.
En caso de bajar la nota crediticia de Pemex, la compañía tendría que pagar más rendimientos a los tenedores de su deuda, por el riesgo de invertir en ella.
