Presbiterio de Morelia: peregrina a la basílica de Pátzcuaro

Morelia, Mich., a 07 de Julio de 2019.- Mañana, 8 de Julio, con el favor de Dios, como cada año, el Presbiterio de Morelia peregrinamos a la Basílica de María Inmaculada de la Salud, en Pátzcuaro Mich., para expresar a nuestra Madre nuestro amor filial y sincero agradecimiento por su maternal presencia e intercesión.

Nuestra peregrinación sacerdotal es la expresión personal y comunitaria de arrepentimiento y conversión, que culmina con el gozo de haber llegado al lugar Santo para recuperar fuerzas, festejar la fraternidad sacerdotal y continuar nuestro ministerio con renovada esperanza evangélica.

Como Tata Vasco peregrinamos a los pies de la Virgen para que ella nos impulse a seguir en el servicio y amor a los pobres, a ser constructores de una nueva sociedad de armonía, amor y paz. El testimonio de Don Vasco y la protección de Nuestra Señora de la Salud nos invitan a renovar nuestro compromiso de pastores para acompañar a nuestros pueblos e impulsarlos a que reflejen la grandeza de su dignidad humana y su capacidad creativa, que ayuden a transformar nuestras raíces, nuestra cultura y tradiciones y conducirnos a construir una sociedad artífice de paz.

Como sacerdotes ofrendamos a María Inmaculada de la Salud nuestra gratitud por la vocación sacerdotal recibida y las actividades pastorales realizadas; como súplica recordamos a nuestros hermanos sacerdotes que han fallecido, pedimos el aumento de vocaciones sacerdotales, a la vida consagrada, al matrimonio cristiano y oramos por un ambiente de paz en el Estado de Michoacán y en México, basado en el compromiso personal y eclesial.

HACIA EL DIÁLOGO, COLABORACIÓN Y CORRESPONSABILIDAD

A un año del triunfo electoral del actual Gobierno del Lic. Andrés Manuel López Obrador, los Obispos de Morelia expresamos nuestra felicitación al presidente de México y también rezamos por él y por todo nuestro México. Nuestro País y nuestra Región de Michoacán estamos mostrando signos considerables de madurez cívica.

Hace un año el partido político, Morena, triunfó en las elecciones para Presidente de la Reública y obtuvo también mayoría en ambas cámaras del Congreso de la Unión, órgano legislativo federal de México.

Como Iglesia reconocemos que López Obrador ganó con una cantidad impresionante de votos, pero creemos que para él y para nosotros quedó muy claro que dos materias se le encargaban: acabar con la corrupción y trabajar para que no haya más violencia en nuestras ciudades y nuestro país, a esto se agregan nuevas situaciones como la de los migrantes. Consideramos que este mandato sigue siendo el mayor reto: Las mayorías que votaron necesitan quedar satisfechas con los resultados y las minorías que pensaban de otra manera también necesitan ser convencidas de que el camino que se lleva en el país es el mejor.

Como pueblo católico, estamos dispuestos a colaborar, siempre en favor de los migrantes y en favor de los pobres. Queremos manifestar la disposición que tenemos como Iglesia y como parte de la sociedad civil, para seguir en el diálogo y colaborar en la construcción de la paz y en lo que nos corresponda con todas las autoridades.

Como Obispos continuaremos en el empeño por construir caminos de reconciliación que lleven a las comunidades a vivir en paz. Hoy más que nunca es urgente promover la paz social. La transformación de nuestros pueblos y ciudades requiere participación ciudadana, corresponsabilidad y generosidad constante, tanto de autoridades como de ciudadanos.

Oremos a Dios para que juntos, Gobierno, iglesias y sociedad civil nos sumemos en un proyecto incluyente y vayamos encontrando caminos que nos unan, nos reconcilien y nos lleven a tener una sociedad más equitativa y solidaria. Confiamos en que tanto creyentes como no creyentes, podamos caminar bajo la guía de los derechos humanos fundamentales, así como en la búsqueda del desarrollo humano integral para lograr un mejor México.